Max Baucus, el Guillermo Moreno Americano.

A sugerencia de nuestro corresponsal en NY, Paul Krugman, la MAK se interiorizo de una terrible violacion de Derechos de Autor en contra de nuestro secretario de comercio, Don Guillermo Moreno (Mr. Willy Brown en Ingles).

Envidioso de la promocion que logro Mr. Willy con sus actos en Argentina y buscando quitarle para si el titulo mundial de Funcionario Totalitario, el senador democrata por el estado de Montana, Max Baucus, y ocho congresistas mas -todos del partido Democrata Bolivariano- le han exigido a la empresa Mc Kinsey, firma internacional de consultoria, que haga publica la metodologia utilizada para construir un informe publicado sobre el impacto que tendria de ser aprobado un proyecto de ley sobre seguros de salud que intenta aprobar Obama.

Con la solemne seriedad y autoridad con que nuestros economistas nos informan periodicamente sobre la inflacion del 2010 que ronda entre 35% y 70% y en franco  aumento (lo que significa que a medida que avanza el 2011 y se acercan las elecciones, la inflacion real medida del 2010 va aumentando), Mc Kinsey concluia, basados en sus investigaciones, que, de ser aprobado el proyecto, la mitad de los empresarios de EEUU suspenderian el seguro de salud privado para todos sus empleados, lo que transformaria esta medida de Obama en un verdadero collar de sandias para las arcas del estado. (La expresion es nuestra, no del informe).
Un aclaracion destacada en el informe es que cualquier semejanda con la presentacion de Belocopitt en el congreso argentino por la ley de prepagas es pura coincidencia pero invitan a Swiss Medical a contactar con Mc Kinsey Argentina de necesitar uno similar. 

Como tipica sociedad Bolivariana, a las pocas horas de presentado este serio informe, le llovieron una metralla gruesa de injurias y pedidos de hacer publica la metologia que sustentaba sus conclusiones. Incluso la “Asociacion Norteamericana sobre divulgacion de Investigaciones de Opinion Publica”, refugio conocido para los pocos soviets que escaparon de Mc Carthy, declaro que en sus estandares figura la practica de divulgar informacion esencial sobre la metodologia utilizada en encuestas hechas publicas y urgio a Mc Kinsey a hacerlo. 

Mc Kinsey, que durante dias se nego a divulgar lo que para ellos es un activo de la empresa, tuvo que acceder a regalarle a la competencia parte de su know how critico al recibir la nota del congreso firmada por “The Willy Fan’s Club”. Pero el directorio de Mc Kinsey tomo nota que mientras en los Estados Polpotianos de America el congreso actua contra la propiedad privada y manipula la libertad de informar, en el otro extermo del continente, en otro gran pais ganadero, los diputados salen a defender a las consultoras privadas en la defensa de sus indices, que aunque muy dispares todos son certeros. Ver Nota de estos verdaderos fedayines de la libertad de empresa dispuestos a perder elecciones pero no relaciones.
En la MAK creemos que en los proximos 12 meses veremos seguramente mudarse la sede central de Mc Kinsey a Buenos Aires.

Como epilogo, sin que sea una sorpresa para quienes sabemos de la fuerte influencia argentina en Mc Kinsey, al analizarse la metodologia se descubrio que el profundo estudio no era mas que una encuesta liviana realizada a empresarios quienes, sin disponer de tiempo o conocimiento para realizar aunque sea una breve suma sobre los costos de suspender el beneficio de salud privado a sus empleados, y quizas respondiendo la encuesta entre copa y copa en un meeting del tea party, respondian seguros: “Yes! Claro que les sacare el seguro a todos si ese Fucking AfroNiger (o por su acronismo FAN) aprueba cualquier proyecto que quiera aprobar”.

Si algunas empresas gastan fortunas para que unos yuppies le preparen un informe lleno de carne podrida solo porque llevara el sello IVESS del lobbysta profesional significa que eso aun funciona, que algunos congresales cambiaran su voto por ese informe. Sino para que unas empresas gastarian una millonada para que un nene de Mc Kinsey les diga lo que ellos mismos opinan de un proyecto?

En la Argentina, en la ultima andanada empresaria por las prepagas, los operativos de tipo “informe con sello” o “encuesta de consultora privada” ya no funcionaron y tuvieron que recurrir al “lobby operado por sus dueños”, en lo que para los anales del lobby sera recordado como en el marketing es recordada la campaña del “Yo, Carlos Sacan, lo garantizo”, el recurso de quien ya no tiene otro recurso.
Si Belocopitt, o cualquier otro empresario, acepta poner la cara no es para ahorrarse la fortuna que le cobra Mc Kinsey por poner la suya, sino por la ineficacia de cualquier alternativa.

Este es otro progreso de la era de descalificacion K.