“El avion era para la campaña de Cristina” sostuvo el empresario de transportes Antonini Wilson.
Aunque por compromisos previos no pudo viajar en el avion, aclaro que ese no era el unico avion en el que mandaron droga y armas para la campaña.
El general John Gutierrez, del servicio de inteligencia de los EEUU, se defendio ante las acusaciones del congreso sobre malgasto de fondos publicos: “El gordo nos cobra mas que por lo de la valija, pero tiene una imagen instalada y segun nuestros estudios da muy bien en TN y en Clarin. Apenas por debajo de Carrio, como nos aseguro Mr. Joke Morales Sola, quien tambien nos aseguro que en argentina esta instalado como un tipo serio, sin dobles intenciones, confiable. Ademas ya tenemos las fotos de Antonini dandole de comer a las palomas en la plaza de Mayo, lo que confirmaria el nexo con Cristina y Anibal. Para que arriesgar dineros inventando un nuevo monigote”.
El senado no pudo mas que aprobar otra valija para el conocido valijero.
Ante la consulta de que harian los servicios secretos ante un avion militar argentino que aterrizara con elementos no declarados. John Gutierrez sostuvo que “eso no es posible, ante la minima duda no llegaria a aterrizar en un solo pedazo. Y si un colimba se sentase sobre una valija negangose a abrirla, duraria lo que la bala en hacer el trayecto hasta su cabeza. Por lo demas todo seria igual, la prensa americana hablaria de heroismo americano y la prensa argentina de patoterismo argentino”. Nuevo aplauso del congreso a su proximo ministro de seguridad, John Gutierrez.
Tengo la sospecha de que el contenido de esa valija tenia el destino de "aparecer" en alguna "organizacion terrorista" convenientemente seleccionada.
¿Para qué era que vino ese avión?
Coherencia, de eso se trata.
Longobardi, un periodista sutil, descubrió que el kirchnerismo, así como lo plantó a Macri en el gobierno de la ciudad, plantó morfina en el avión norteamericano para generar un conflicto diplomático con EEUU con el objetivo de desviar la atención de los medios sobre la inminente candidatura de Scioli a presidente.
Si hubiera sido al revés, si un oscuro funcionario norteamricano de migraciones hubiera detectado morfina, armas o ruleros no declarados entre el equipaje de soldados argentinos, Longobardi hubiera hecho exactamente lo mismo: hubiera defendido la actitud norteamericana (¨el funcionario cumplió con su deber, ojalá tuviéramos nosotros funcionarios así¨) y denostado la actitud argentina (¨me pregunto, ministro, que hacía un oficial argentino intentando ingresar de manera ilegal morfina, armas y, aún más sospechoso, ruleros, a los EEUU…¨).
Coherencia. Toda una vida dedicada a defenderla.