(En la foto, sus compañeros se despiden de ella)
El motonauta de La Plata sostuvo ante camaras que no puede confirmar si se trataria de la minera numero 34. “Es momento de seguir trabajando para la provincia y acompañar a la familia. No es tiempo de promociones personales”.
Aunque otros lo escucharon lamentar su suerte: “pedi 33 mineros para navidad y me mandan una nena en un pozo. Es obra de Nestor”.
Durante la tarde interrumpio la boda del amigo Maurizio para pedirle prestado su experto en sombras chinas, Yano Duran Barba. Confiando que con su talento en hacer parecer grande lo minusculo podria, sin esfuerzo, inventar en Florencio Varela una mina como la de San Jose, a riesgo de enfurecer a Pino, y llenar con este drama las tapas de los diarios internacionales de mañana. “Todos tenemos derecho a nuestro momento G20”, penso.
En su suplica a Yano le dijo “nadie podria acusarme de ser menos de derecha que Piñera y si lo que falta es una sonrisa criogenizada podria pedirle a Mauri que me preste tambien a Rodriguez Careta, a riesgo que no me lo acepte de vuelta”.
Pero Yano Duran le explico el concepto de la escala inversa. “Es facil sostener que un pais sigue en un pozo, despues que ya salio, pero se complica mucho hacerlo con una nena, ni que hablar si sonrie en camara.
Suena raro, pero es asi.
La operacion de rescate fue un exito, hay que reconocerlo. Despues de un roce menor, las camaras dejaron pasar a los rescatistas. Y rescatistas, politicos, periodistas y vecinos supieron trabajar en paz, en convivencia, compartiendo el mismo lugar, sin crispasion y sin impedir que la audiencia este informada a cada instante y en vivo. Clima de cordialidad se vivio durante toda la tarde. Donde ninguno se sintio protagonista, ni la nena.
Con muchos menos recursos, en menos tiempo, y arriesgando menos vidas, el poder politico local logra asi casi el mismo efecto que el modelo transandino. Una leccion que aprender.
Como Lan, que aqui tiene su version de cabotage.
En algun momento de la tarde dramatica el gobernador, compungido, penso que si de el dependiera cambiaria de lugares con la pequeña Vanesa.
Sin saberlo, gozaba de uno de esos extraños momentos en los que un lider siente como propia la voluntad de sus representados. Si dependiense de nosotros, todos lo habriamos hecho.
Incluso agregariamos algunos mas al combo, si el pozo fuese lo suficientemente profundo.
Jorge
Yo no me haría ilusiones. La vieja rosca enquistada en el Estado no va a permitir esa inyección de sangre joven, de Nueva Política, que pondría en peligro su propia existencia.
Con algún argumento falaz, leguleyo, mediocre, frenarán la justa visión de Badeni e impedirán que Vanesa presida los destinos del Senado y reemplace a Cobos en nuestros corazones.
Siempre es una buena noticia la llegada de gente no contaminada a la cosa pùblica. La pequeña Vanesa ha demostrado no tener contactos con la política (solo escuchaba a su madre, que – aunque boliviana – no parece mala), y sobre todo nos diò a todos una leccion acerca de como salir del pozo: rapidamente y sin discusiones entendiò las dos o tres cosas básicas necesarias y las llevó a cabo, sin perderse en discusiones estériles.
Si bien el asunto de la nacionalidad ya queda solucionado por el Ius Fornicae de Badeni, nos quedaría el problemita de la edad de la Nueva Esperanza Blanca de la Gente. Esperemos que los jueces se pongan las pilas y no arruinen con su politiquería barata -que tanto mal nos hizo – el acceso al gobierno de la simpática Vanesa.
Muy buen post.
Es cierto que cuando queremos podemos. Todos juntos, sin crispación y con consenso, olvidando viejas antinomias y viejos desencuentros, mirando para adelante, sumando en lugar de restar, buscando solucionar los problemas de la gente, con gestión y con trabajo. Y si es con cámaras mejor.
Scioli abría consultado con Gregorio Badeni sobre la posibilidad de llevar a Vanesa como vicepresidenta en 2015. El constitucionalista, autor de la doctrina que lleva su nombre y estipula que es argentino quién haya sido concebido en territorio nacional, no rechazó de plano dicha posibilidad aclarando que si bien Vanesa sería todavía menor en aquel momento (tendría 8 años), sus padres y abuelos no.
Para pensar.
Bosnio, muy bueno el post. Gracias por quedarte hasta tarde para escribir tan esclarecedora nota. Siento que podria haberla escrito yo.