Termina otra semana trepidante en la que no tuvimos lluvia de inversiones pero tampoco Pobreza Cero, es decir, una de cal y otra de arena. Además, como bien dijo el ineludible senador Pinedo, los logros del Gobierno fueron desarmar el “Estado mafioso” y “conquistar la estabilidad económica”. Es una noticia alentadora.
Al parecer, para terminar con las mafias públicas alcanzaba con entregarle la administración del Estado a sus contratistas y para terminar con la inestabilidad económica sólo era necesario financiarnos con deuda hasta que los mercados se negaran a seguir prestándonos y debiéramos recurrir con urgencia al FMI. Es una pena que no lo hayamos sabido antes.
Además, la Cámara de Diputados aprobó el presupuesto 2019 con un ajuste de $475.000 millones, otra noticia alentadora. Como todos sabemos, que el Estado ajuste en medio de una coyuntura recesiva es una decisión sabia. En efecto, cuando el sector privado ya no invierte, que el sector público deje de hacerlo sólo puede acelerar la salida de la crisis e incluso pueda incentivar al Espíritu Santo a invertir.
Es cierto que el presupuesto del 2017 fue aprobado con 177 votos a favor, el del 2018 con 165 y éste con apenas 138, pero esa merma de entusiasmo no debe ocultarnos lo esencial, es decir, la seriedad de nuestros diputados. Como el joven y socialdemócrata Martín Lousteau quién luego de sostener que le parecía un “presupuesto grotesco” explicó que lo votaría. También aprovechó para denunciar otro de nuestros dramas: el exceso de pensiones por discapacidad. Según Cambiemos y sus satélites, nuestros dramas son los pensionados, los jubilados, los investigadores, los sindicatos, los asalariados que no quieren perder poder adquisitivo y los inmigrantes. Debemos reconocer que hay que tener mucho coraje para enfrentar a tantas mafias juntas.
Luego de otorgarle un préstamo por $ 56 mil millones de USD a cambio de recortes en el gasto público, el staff del FMI criticó al gobierno “por el manejo de la crisis y el deterioro de la economía” y “empeoró sus pronósticos para la Argentina y dejó saber su preocupación por la posibilidad de un estallido social a fin de año, ante el cóctel de una recesión peor a la prevista y una inflación cercana al 50% anual”. Christine Lagarde es una jugadora de toda la cancha.
Además de prestar plata y denunciar, según el periodista mapuche-iraní Ezequiel Orlando de El Destape, el FMI acordó con el gobierno los siguientes pasos con respecto a la política provisional:
1. Cambiar la fórmula de actualización de haberes
2. Recortar las pensiones universales
3. Aumentar de edad jubilatoria
4. Imponer un sistema de capitalización individual (AFJP)
Es otra gran noticia, las docentes jubiladas podrán volver a cenar a Puerto Madero. La vuelta de la mita y el yanaconazgo quedaron lamentablemente para después de las elecciones.
Luego de la masiva marcha frente al Congreso durante el voto del presupuesto y los desmanes posteriores, asistimos una vez más al fenómeno conocido como Nado Sincronizado Independiente (NSI), cuando periodistas y funcionarios llegan a las mismas conclusiones, pero de forma independiente. En efecto, el ministro de Interior Rogelio Frigerio y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich nos pusieron al tanto del nuevo peligro imaginario que acecha a la Argentina: dos venezolanos, un turco y un paraguayo, quienes estarían detrás de una conspiración global con intenciones tan golpistas como satánicas.
Sin tener idea de lo que habían hecho, el incansable senador Pichetto pidió su inmediata expulsión del país y un coro de periodistas tan independientes como indignados apoyó esa iniciativa. Según Daniel Santoro, los jóvenes apresados formaban parte del Black Bloc, algo que en realidad no es una organización global como sostiene el conocido periodista sino una forma de manifestar; mientras que para Federico Andahazi, nuestro gorila engolado, se trataría de dos “agentes de inteligencia del gobierno de Maduro” y “el turco y el paraguayo son activistas anarquistas que estaban entrenando para participar de los disturbios en el G-20”.
El comando venezolano-iraní de van der Kooy cedió lugar a la guerrilla kurdo-mapuche de Lanata, luego a la alianza kirchnerotroskista del ministro Finocchiaro y hoy tenemos a los anarquistas turco-paraguayos de este pobre desquiciado. En esta #RogelDeOperaciones, cada nueva capa tapa la anterior. Por supuesto, salvo los medios alternativos, nadie se preocupó demasiado por estos nuevos chivos expiatorios. Al fin y al cabo nunca negaron ser inmigrantes y eso es casi una confesión de parte. Los venezolanos pasaron así de ser ciudadanos ejemplares que huyeron de la dictadura chavista con sed de democracia y vinieron a buscar empleos precarizados en la Argentina para terminar con los abusos de las cargas sociales, a ser agentes de Maduro al servicio del golpismo kirchnerista. Nuestra realidad es trepidante.
El 27 de octubre se cumplieron 8 años del fallecimiento de Néstor Kirchner. En aquel entonces habíamos escrito esto en La Radio MAK. Según TN, que nunca descansa, “como Maduro en Venezuela, Magario recurrió al hit ´Despacito´ para cerrar su discurso en el acto por el 8° aniversario de la muerte de Néstor Kirchner”. Y no sólo eso: Verónica Magario llevó también una cartera, como hacía Eva Braun, y tenía el pelo suelto, como Atila.
Hoy es la segunda vuelta de la elección presidencial en Brasil. En unas horas más sabremos si encerrar preventivamente al candidato que más medía a través de una operación judicial digna de nuestro Dr Bonadio fue una maniobra exitosa o sólo pegó en el palo.
Todo lo que quieran pero ya no le tenemos miedo al censista.
Imagen: una paciente ambulatoria de la Fundación Alfredo Casero para el tratamiento de las psiquis devastadas por el kirchnerismo goza de su cápsula Andahazi (gentileza Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED)